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CARNE DE CAÑÓN (2ª ED.)
El Kilian se ha comido un meco contra el canto de la mesa que ahora se desangra a chorros y casi se le puede ver el cerebelo. A la Yanira, que es la hermana mayor, se le ocurre pedir auxilio a los jevis de abajo, que son un par que huele raro. El Jose, entretanto, permanece abducido por su casiotone. Un casiotone a pilas. Un casiotone de mierda. Así empieza Carne de cañón. Acabar acabará como el rosario de la aurora, eso es lo único seguro.
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Somos muy de nuestras cosas
BlogNosotras somos mucho de nuestras cosas. Como cualquiera, vaya. Aquí cada una es mucho de lo suyo. ¿No? Es decir, … Continue reading «Somos muy de nuestras cosas»